“El Señor estuvo a mi lado y me dio fuerzas” (2 Tim
4:17, 18). Esto me hace
pensar en dos cosas. Primero, que necesito a Dios a mi lado porque necesito fuerzas.
Segundo, me hace pensar lo importante que es estar al lado de las
personas, especialmente al lado de nuestros hijos. Me hace pensar del tiempo cuando mi hijo de
17 años me dio gracias por mi presencia.
El se sentó en la mesa de la cocina a hacer su tarea. Yo le pregunte que si nesitaba ayuda. El dijo
que no, asi que yo ya iba para mi cuarto con mi laptop, pero de repente me para
y me di vuelta cuando lo escuche decir “pero te puedes sentar aquí”. Yo me senté en la mesa y me puse a trabajar
en mi laptop y el siguió haciendo su tarea.
Cuando termino, dijo, “gracias mom….por sentarte aquí”. Ni les puedo explicar cómo me sorprendió lo
que dijo. Yo no había hecho nada. Nada mas me habia sentado alli.
Los padres algunas veces nos sentimos mal porque no tenemos la capacidad
de ayudarles con la tarea a nuestros hijos.
Déjate te pensar eso. Créeme…aun si
tu tuvieras una licenciatura en matemáticas no les podrías ayudar a tus hijos
con su tarea, porque ahora lo hacen diferente.
Y si lo intentaras, lo único que lograrías seria empezar una discusión con
tus hijos de “como” se debe de hacer. Si, lo se,
porque ya lo intenté. Yo ni siquiera les podía ayudar con revisar la tarea porque eso también causaba
problemas…a nadie le gusta que le digan que están equivocados. Así que al fin, me puse lista y les dije que quería
que ellos mismos revisaran su tarea con la calculadora. Así me evitar de ser la que les decía que
algo no estaba bien. Ellos mismos podían
ver si algo no estaba bien y luego tenían que averiguar como corregirlo. Además,
de esta manera siempre sacaba un 100 en su tarea de matemáticas!
Mi mama nunca fue a la escuela, sin embargo, ella nos ayudo en la manera
más poderosa que hay. Ella siempre nos llenó
nuestra tasita de amor, siempre nos animó y siempre creyó en nosotros.
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